RINCON CONCILIATORIO

Directora Abogada Rocío López Luna
DIRECTORA DEL CENTRO DE CONCILIACIÓN «MADRE DE CRISTO CONCILIADORA»
Av. Benavides 767(a 1 cuadra de la Corte Superior de Cañete), San Vicente
Cel. 999 210 236, T. 01 3005603


Mi hermoso trabajo en el Centro de Conciliación me impulsa a buscar caminos a solucionar problemas, sobre eso he compartido con ustedes queridos lectoras y lectores muchas historias VERDADERAS.
En la última HISTORIA FELIZ DE UN DEUDÓN, este señor pudo resolver su prueba a través de la generosa institución bancaria que le dio la posibilidad de cumplir con sus deudas pero, también le informó de un campesino como él, que alquilaba a precios asequibles, pero ¿qué hubiera pasado si no hubiera sido así?, entonces lo único que le hubiera salvado sería conseguir un trabajo cuyo pago le permita salir de sus deudas, ¿pero creen ustedes que lo logrará si sólo gana S/. 25.- diarios por jornalear?
A nuestro Centro de Conciliación se acercan mujeres desesperadas con hijos con hambre y/o enfermos, se acercan vecinos o hermanos con riñas por tierras, se acerca el pobre porque no puede correr con los gastos de un juicio y sus secuelas, pero también se acerca el adinerado que desea salvar relaciones comerciales o a veces LO QUE MÁS LE IMPORTA ES LA VALIOSÍSIMA CONFI-DENCIALIDAD QUE OFRECEMOS.
Son muchas las razones por la que Cañete entero recibe sus CONSULTAS JURÍDICAS GRATUITAS EN NUESTRA OFICINA (la dirección está arriba ;) ), pero en el 80% de los casos hay una razón adicional a tanto altercado, insultos, agresividad y odios: ¡FALTA INGRESOS, PORQUE FALTA TRABAJO!
Es por ello que en esta oportunidad, aprovechando la sensibilidad social de MATICES, me permito presentarles oficialmente nuestro:
 
PROGRAMA CONCILIATORIO DE EMPLEO
Si quieres cumplir con tus hijos la Pensión Alimenticia, pero no te alcanza: INSCRÍBETE
Si quieres pagar tus deudas pero no le quieres quitar el pan a los tuyos: INSCRÍBETE
Si quieres dejar de tener problemas de áreas de tu terreno, pero no puedes pagar los gastos de Registros Públicos: INSCRÍBETE
Si quieres, simplemente, una chambita para no molestar a tus padres: INSCRÍBETE
Si quieres contar con personas que trabajen para ti, y sean de confianza, también: INSCRÍBETE
Si quieres con tu empresa colaborar a un Cañete con menos violencia: INSCRÍBETE
EL CENTRO DE CONCILIACIÓN «MADRE DE CRISTO CONCILIADORA» PROMOCIONA EL EMPLEO PUES ESE ES EL MODO MÁS EFECTIVO DE DISMINUIR LA VIOLENCIA EN CAÑETE:  TE INSCRIBE GRATIS, TANTO SI NECESITAS TRABAJO O TRABAJADORES: ¡ADELANTE!.
DEJA EL MIEDO Y LA DUDA, DEJA LA OSCURIDAD, ENTRA E INSCRÍBETE AL PROGRAMA CONCILIATORIO DE EMPLEO
 
Pero ahora deseo que pienses que TÚ puedes ser el o la protagonista de esta historia:

HISTORIA DE UNA BUENA VECINDAD, NO TAN BUENA
Sus padres habían sido amigos del alma, quizás ahora seguían jara-neando en el cielo: el padre de Joaquín era un primoroso guitarrista, y el de Pedro un cajonero imbatible: ¿ahora se los imaginan mejor?. Tanta fue su amistad que uno era ahijado del otro y viceversa… pero de eso hacía mucho tiempo.
Joaquín se fue a Lima a estudiar Teología, volviendo totalmente cambiado, muy espiritual, y con unas ganas enormes de compartir su fe con «sus muchachos» pues se había convertido en un gran profesor de religión.
Pedro se quedó por acá, muy trabajador como su padre, había comprado unas buenas hectáreas, cuidaba de su madre enferma, pero, siguiendo los pasos de su padre, hacía unas fiestas «de rompe y raja» que daban de hablar a todo Imperial.
Cuando se reencontraron los amigos de la infancia y sus juegos, quedaron ambos boquiabiertos: Joaquín pensó «Pedro parece Chapulín el dulce», y Pedrito por su parte «y este se cree Cantinflas disfrazado de profesor Jirafales». Sus respectivas esposas tampoco congeniaron grandemente: una prudente y discreta, la otra chicharrera y extrovertida…
Y bueno, por lo demás, vecinos colindantes.
La dulce mujer de Joaquín estaba en el sétimo mes de embarazo, y habían traído a su padre, quien padecía de hemiplejia. Luego de las visitas de cortesía, todos concluyeron que eran personas distintas pero que hoy por hoy sólo compartían la vecindad. Concluyeron que todos no tenemos por qué ser iguales, que somos un país multiculti, y todo lo que nos dicen al respecto: bla, bla, bla.
En realidad a los dos días de su llegada, es decir el sábado, saltaron los grillos, sapos y culebras: Pedro celebraba el bautizo de sus hijos mellizos, y como era doble la alegría, celebró dos días.
Fueron lógicamente invitados, pero cuando llegaron a las 8 de la noche los demás invitados ya estaban «bastante picados» desde la hora del almuerzo.
Un caballero sacó a bailar una lambada a la esposa de Joaquín, y ¡ustedes ya se imaginan!, a los pocos minutos se estaban despidiendo apresuradamente.
El tiempo corrió luego lentísimo, como navegando una chalanita sobre aceite, ya eran las 3 de la mañana y no podían cerrar un ojo ni Joaquín, ni María, ni el bebito en camino, y menos el padre de María. Eso generó una emoción inevitable: LA IRA
Continuaremos nuestro próximo Rincón Conciliatorio, amigas y amigos, por lo pronto, no olviden que te puedes inscribir gratuitamente a nuestro:
PROGRAMA CONCILIATORIO DE EMPLEO
Afectuosamente,
ROCIO LOPEZ LUNA