23 octubre 2008

PRONAFCAP 2008, No cumple…
MAGISTERIO CAÑETANO A PUNTO DE EXPLOTAR…

SAN VICENTE.- El programa nacional de formación y capacitación docente, PRONAFCAP - 2008 que se desarrolló en Cañete, hasta la fecha no le ha cumplido a sus participantes.
Este programa empezó su etapa ejecutiva la última semana de febrero y se prolongó hasta el 24 de agosto del año en curso.
Los docentes participantes fueron previamente seleccionados y ubicados de acuerdo a los resultados de la primera evaluación censal a la que fueron sometido bajo una etapa de presión y chantaje.
Han sido alrededor de setecientos profesores participantes de los centros educativos estatales de los tres niveles básicos de todo el ámbito de la provincia.
Las jornadas pedagógicas se desarrollaron los días sábados y domingos desde la siete con treinta minutos de la mañana hasta la una de la tarde con cincuenta minutos de la tarde, con un receso intermedio de diez fugaces minutos que no les deba tiempo ni para ir a los servicios higiénicos.
Durante la semana los sufridos docentes tenían que realizar trabajos de investigación vía internet con la consecuente horas extras y gasto de dinero de sus míseros bolsillos.
Por disposición legal cada docente debió recibir la suma de doscientos cincuenta nuevos soles por concepto de viáticos y movilidad.
Por mandato de una directiva esta suma debió ser abonada por partes a razón de cincuenta nuevos soles mensuales, ofrecimiento que jamás se cumplió.  Luego se les prometió su cancelación a final de curso, posteriormente se trasladó la promesa para fines de setiembre… octubre, hasta la fecha, nada.  Paralelamente se les prometió un aporte económico de doscientos nuevos soles a los docentes que al final del curso obtuvieron su calificativo de dieciséis a más, ciento cincuenta nuevos soles para los que obtuvieron calificativos que oscilan entre doce y dieciséis; y cero nuevos soles para los que no alcanzan la nota aprobatoria.
A juzgar del rigor de las pruebas y el tiempo disponible para resolverlas ha sido sumamente difícil hacerse acreedor a esta promesa también incumplida.  
Los participantes para poder cumplir con sus obligaciones han tenido que realizar esfuerzos que van más allá de sus posibilidades. Los gastos por ellos efectuados son infinitamente superiores a los montos compensatorios con los que hasta ahora se los viene engañando.  Las tareas que se les dejaban implicaban muchas horas de pago por el uso de Internet, pago por tipeado, compra de materiales para uso computarizado.
Muchos docentes se trasladaban de lugares muy lejanos a la capital de la provincia con los gastos y riesgos que ello significa, como por ejemplo salir de madrugada de sus casas y volver muy avanzada de la noche.
Mientras duró el desarrolló del progreso sus quehaceres domésticos estuvieron descuidados y su familia abandonada.
A la par debían atender con eficiencia sus obligaciones frente a sus alumnos y padres de familia.  Las horas que normalmente se distribuían para el descanso o el sueño eran utilizadas para lavar, coser, ordenar, preparar documentos y materiales didácticos.  Es increíble que hasta la fecha, ningún docente conozca sus calificaciones.  ¿Qué malos ejemplos están dando los formadores y capacitadores… aún está pendiente la clausura del programa?.
¡Urgente, atiendan los justos reclamos de los participantes del PRONAFCAP, no esperen el estallido de una protesta generalizada!. (rdb).   

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