11 diciembre 2006

UN APUNTE, PARA EL COMENTARIO y el análisis pedagógico…
Escribe Antonio Ruiz.

Verano del 2006 Wisconsin- EEUU…
Cuando un padre de familia, amigo de la infancia, me contó que un maestro había solicitado a su hijo, una suma de dinero, para aprobarlo en el curso, tan solo moví la cabeza.
Me quedé callado y opté por retirarme.
Lo que me dijo, parecía algo no creíble.
Al día siguiente, cuando visité a uno de mi más dilecto ex compañero de trabajo allá en el glorioso Sepúlveda, entre otras cosas tocamos ese punto, sin expresar de que muchacho se trataba; por lo demás no sabía qué maestro era el corruptor, ni en qué centro de estudios trabajaba, pero él, si estaba informado.
Mi colega, supo decirme que dolorosamente, se dan casos de pedidos de dinero, objetos u otras dádivas, por parte de “ciertos colegas” para esos fines innobles.
- Así están las cosas Antonio, hasta dónde se ha llegado en el ejercicio del magisterio. Es inaceptable que esto se dé, pero, se dá. A mi me duele mucho, esas manchas en nuestra profesión, a la que amamos tanto, y a la que nos entregamos con alma vida y corazón cuando ejercíamos.
- Que pena en verdad. No hay nada, ni la pobreza, ni la necesidad, ni la baja paga que justifique tamaño disloque ético... Y de dónde es ese fulano?
- Felizmente no es de Cañete; vino a trabajar y se ha afincado acá.
- Bueno, que sea de nuestro pueblo, o no, eso no cuenta, basta que sea un maestro peruano egresado para cumplir tan patriótica función y se avenga a realizar tamaña conducta de lesa educación. O sea que hasta los estratos magisteriales ha tocado la enredadera que se llama corrupción... Entonces sería conveniente que en cada colegio se forme comisiones estudiantiles que entre otras cosas tengan puertas abiertas en la Dirección y ante la Asamblea de Profesores para denunciar esos actos ilícitos notorios y públicos dentro del plantel. Así, los jóvenes se entrenarían para ejercitar una labor de prevención de esa lacra que se evidencia como la enfermedad del siglo, lógicamente sin revanchismos ni espíritu de maldad; entre otras como una práctica del curso de educación cívica
Y estas comisiones estudiantiles trabajarían además con la Fiscalía encargada de la prevención de delitos, de la localidad; nada le impide que existan dado sus altos fines. Además la acción del ministerio público tendría un punto hermoso de prevención.
- Me parece interesante la sugerencia, pues muchas asociaciones, dejan mucho que desear en el cumplimiento de sus funciones.
Los estudiantes tienen que tomar conciencia de sus roles, y modificar sus perfiles.
Esos malos profesores manchan la imagen magisterial, y la de los planteles donde laboran. Qué buena la idea, y además creo que el Colegio de Abogados bien puede organizar un ciclo de charlas sobre eso de la corrupción, especial para jóvenes, lo mismo que el SUTEP. Así como Cañete fue la fuente originaria del SUTEP, bien puede ser el foco, la matriz, que ilumine el camino y rescate de lo ético en el ejercicio de la docencia.
- Así es.
Hablamos de tantas cosas y llegamos hasta a recordar nuestras épocas de estudiantes.
Vino a nuestra memoria las acciones del CENTRO CIVICO SEPULVEDANO y sus grandes acciones socio culturales, allá por el año 1967.
Por mi parte, entre tantos recuerdos, vinieron a mi mente la figura del profesor José Morales; intachable, erudito, y un gran pedagogo. Qué didáctica, qué precisión y cómo dominaba todas las materias. A pesar de haber sido su colega después, siempre le llamé profesor, incluso hasta cuando me hice abogado.
A Honorina Huapaya, tan dulce, tan llena de amor cristiano, tan entregada a la causa de defensa de la juventud femenina por excelencia. Esas clases maravillosas de educación familiar. Ella fue soporte para que la generación sepulvedana andara por los caminos del bien y no de los extravíos.
El profesor Alejandro Viso, propulsor del deporte sepulvedano desde su curso de educación física. Amigo de todos, pero exigente en el cuidado de la forma atlética.
Adán Paredes Segura, gran pedagogo egresado de la facultad de biología de la U de Trujillo. Esas maravillosas clases, sin tabúes, pero con seriedad docente. Ejemplo vivo de un maestro especializado, dominador de su materia, de la didáctica y de la psicología aplicada a la educación de adolescentes; de Jacinto Navarro, el autor del himno del plantel, un verdadero artista, olvidado, pero por mi, muy recordado y apreciado; de Blanca Zapata de Bahamonde, la maestra amiga de los alumnos, que instruía con amor dentro de una firmeza de palabra; Felícita de Samaniego, la maestra dulce, tierna, amante del buen hablar, élla nos hizo amar el castellano, la poesía, la literatura... Qué hermoso ramillete de docentes, en el sentido cabal de la palabra.
Entre recuerdo y recuerdos, se fueron pasando las horas. Cuando menos acordamos eran ya las once de la noche; y allí seguíamos. Como cosa rara, en esta oportunidad no hubieron botellas de cerveza en la mesa. Después de la comida, solo bebimos agua mineral, y en la conversación no fumamos un solo cigarro. El, respetó mi alejamiento de las bebidas alcohólicas, de la nicotina, lo que le llamó la atención, animándose a preguntar la razón de esto.
Lo único que le respondí fue que por leer la Biblia había dejado esas cosas y otras mas, y que, tampoco ya no me arrodillaba ante “santos” de metal, madera u otro material, hechos por la mano del hombre, que no hablan, no escuchan, que se despintan, se mohosean, o se rompen y que eso, era para mi, idolatría del pasado.
Un punto interesante que conversamos, fue el relacionado con la formación de los maestros en algunos centros superiores, de orden “privado” que enseñan limitando el ejercicio de derechos de los estudiantes y sometidos a criterios dogmáticos, cerrados generando, un miedo, un temor, que tontamente lo acepta el estudiante, sin acordarse de que todo aquello que es cultura superior, es para formar libres pensantes, que desde luego bien pueden cumplir con la programación de los cursos, pero sin que se limite o frene las inquietudes de quien en potencia pudiera ser algo mas que un simple maestro de aula, y esto sin agraviar a nadie, un pedagogo, un técnico o filosofo de la educación.
- Y tu que le dirías Antonio, al estudiante que se ve lastimado en sus derechos de tal, en ese tipo de entidad?
- Sencillamente que no tenga temor, ya que las situaciones de injusticia bien pueden denunciarse ante el poder judicial, instancia donde se valora si hubo o no infracción a algún derecho que esta garantizado por la Constitución y las leyes. Un estudiante de pedagogía, se supone va a ser el líder comunal de mañana y requiere formar su perfil, con dignidad, siendo respetable, y haciéndose respetar. La patria no quiere maestros timoratos con las dos primeras acepciones que la real academia de la lengua española define el significado de la palabra, sino en la tercera acepción: maestro timorato que “tiene temor de Dios y se gobierna por EL en sus operaciones”. Se colige que este estudiante, actúa bajo el sentido cristiano con libertad sin temor a los hombres, pero comportándose a la altura de un hombre libre, sin libertinajes, sabiendo que la sabiduría mas hermosa y grande es precisamente el temor a Dios; y por ende ya no vive sujetándose a tradiciones... Estamos en un nuevo milenio, no estamos en épocas de la santa inquisición.
Quizás me digas por qué antes no dije nada; pero como te precisé ahora, leyendo la Biblia tengo ojos para ver y oídos para escuchar.
Los tenía pero no me permitían vislumbrar lo dañoso que son ciertas cosas en una comunidad.
Igual, antes la coima era común en el poder judicial. Era parte del desenredo o enredo de un litigio, hasta que alguien dijo BASTA, y abrió los ojos a muchos, que vieron que en efecto, eso era un acto de INMORALIDAD TREMENDA, LA TIPICA CORRUPCION, que de seguro subsiste, pero lo cierto es que esta cosa ya esta perseguida.
La lectura de la Biblia, te libera el pensamiento, el sentimiento; te rompe lo que es tradición, la tradición nociva que amarra a los pueblos y no lo deja avanzar; la que subyuga.
Quisimos seguir conversando, pero la necesidad de tener que retirarme, pues al DIA siguiente tenía que viajar a Lima para retornar a los Estados Unidos nos hizo estrecharnos en un abrazo de hermanos... Le dejé mis saludos para otros amigos profesores que no tuve la oportunidad de visitar y el disquete que contiene este artículo para que le entregue a Wilfredo Cayllahua, a fin de que lo publique si cree importante, necesaria la divulgación de su contenido.
Le estreché su mano, y no sin antes hacer votos para que el estudiante, valore, respete y apoye a su maestro en su hermosísima tarea de formar mentes abiertas para una vida en democracia, en formar espíritus amantes y defensores de la naturaleza. Para que se prepare con seriedad para enfrentar los grandes retos de la globalización y los grandes problemas que genera este salto de la historia. A entender con claridad las transformaciones económicas, sociales, culturales que el mundo experimenta en el presente siglo, aprender el inglés u otro idioma; seriamente computación, no para el simple y vulgar chateo; y, mantenerse en optimas condiciones físicas y mentales, sabiéndose poseedor de la energía juvenil que todo lo puede, pero mirando al cielo, pidiendo a Dios en el nombre bendito de su buen amado hijo Jesús, le dé sabiduría para que sepa escoger el mejor camino que le genere prosperidad personal y familiar.
- Antonio, y a los maestros qué les dirías?
- A éllos, que se hagan mas dignos, y que dignifiquen la profesión; que se preparen y que se mantengan actualizados y traten a sus alumnos con amor, y sobre todo que enseñen con el EJEMPLO, como enseñó Jesús. Que recuerden que el maestro es el que conduce, el que guía, el que enseña el camino y no solamente el que instruye.
Y a quienes fueron mis maestros, gracias por haberme formado para ser útil; para servir.
Pero también habría que agregar un grito a esos hermanos que alguna vez fueron alumnos y que hoy tienen en sus manos el poder, que es deber del Estado, asegurar una existencia digna al forjador de las generaciones... Que no esperen que el “combativo” Sutep tenga que salir a las calles abandonando las aulas a “mendigar” los justos y legítimos aumentos.

NOTA DE REDACCION: El autor de la nota reside en Wisconsin , EEUU.
Nos dijo que no quería hacer un artículo muerto, sino uno que despierte el comentario, la crítica, charlas, conferencias, mesas redondas, sobre el rol de la juventud, del maestro, ética docente etc...
Son libres las asociaciones de padres de familias o se mueven estimuladas por mandatos politiqueros?. Les interesa, cabalmente hablando, el futuro de sus hijos?. Que es la comunidad educativa? Produce acciones en favor de la educación???
Antonio Ruiz Tovar, Maestro de maestros ( fue profesor de la ex normal de la provincia) hace votos para que todas las entidades mencionadas se avoquen a enlazar acciones a favor de la juventud , de la educación y de una elevación cultural del docente que labora en la provincia, en el marco de un nuevo amanecer; y que al maestro no hay que verlo sólo, sino conformante de la gran familia educativa, al que hay que apreciar y estimular.
Consideramos valioso este apunte, y estando próxima la evaluación docente lo volvemos a publicar esperando que sirva a los altos fines que pretende el autor. Y en realidad porque es un artículo para hoy, mañana y siempre… Y, además, como un tributo a su hermano Jorge Ruíz Tovar, quien acaba de fallecer, víctima de un Infarto cardíaco.

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