ESSALUD EN CRISIS ESTRUCTURAL…
JUAN SALAS: El DOCTOR DE “ALTA INVESTIDURA”
Por: Prof. Willy Contreras Huarachi. DNI 15422094
Hace poco tuve necesidad de acudir al seguro y supongo que muchos sabrán lo que es esta odisea, larguísima cola, como en los “mejores tiempos apristas”, luego de tres horas de largo y tortuoso plantón, logré llegar entre aturdido y cansado frente al recepcionista y era como llegar al edén; muestro mi boleta, mi DNI, y me comunican que no hay atención para pediatría, mi leve tiempo de gloria pasó al purgatorio, la desazón hizo presa de mis ansias y le increpé no habérmelo anunciado antes y no esperar en vano, para consuelo me dijo que solo había cita a futuro y convine que era inútil discutir con personas tan frías como sus computadoras. Luego pensé, si hubiera llegado a las 3 de la madrugada, quizás conseguiría un cupo. Pero aquel día, señor periodista, solo habían dos recepcionistas, el recinto de admisión estaba abarrotado, al retirarme la cantidad de personas no había disminuido. Me fui con la imagen terrible de ver personas de avanzada edad en resistencia heroica al estar de pie, señoras con bebe en brazos pugnaban por un lugar de descanso, madres gestantes, niños, haciendo denodados esfuerzos para mantenerse enhiestos. Lo peor sucede ante el verdugo de ventanilla quien afirma: “ya no hay cupos”, “le falta un documento”, “no esta actualizado”, “la atención es personal” - ¡pero es para mi niña! – “traiga su partida de nacimiento” “traiga su boleta”. Entonces uno se pregunta para qué diablos existen las computadoras, allí están todos nuestros datos, basta mostrar el DNI y punto. Concluí que para sacar cita había que preparase con antelación, solo los noctámbulos tienen suerte. Es como ir a la guerra, partir un día antes (imagino, como serán los que vienen de lejos, Lunahuaná, Pacarán, Chilca), llevar doble frazada que nos proteja del penetrante frío nocturno, acomodarse lo mejor posible en las frías paredes del seguro, un banquito en el cual descansemos nuestra preocupación, unos cigarrillos cuyo dañino humo nos transporte al enigma del olvido, un termo con el té caliente un vasito del buen pisco para entrar en calor y en los sueños entrecortados de esa larga noche soñar que tenemos la ansiada cita, balbucear un gracias y hasta luego, sonámbulo regresar a casa con el deber cumplido, nuestra familia tendría atención aquel día.
El pésimo servicio que brinda ESSALUD es comparable con la realidad peruana, un estado deficiente y los gobiernos de turno contratando personal incompetente para que rija los destinos de instituciones que brindan servicios a seres humanos. Lo peor que existe tanta burocracia y papeleo por un servicio que cada asegurado paga mensualmente, religiosamente… ¿para que nos maltraten?, ¿para que nos hagan esperar una eternidad?, y al final de todo la receta clásica: Paracetamol y Amoxicilina. Asunto solucionado, no hay antibiograma previo, los análisis demoran una eternidad, el paciente partió al mas allá, con San Pedro y recién llega los resultados, el colmo que reciben muestras solo a determinada hora, como si pudiéramos controlar los esfínteres y necesidades de nuestros niños, ¡este es el hospital de la muerte! ¡y ni hablar del maltrato de ciertos doctores y enfermeras, (no todos, tambien hay muy respetables) creen que el publico es mercancía, se ha perdido sensibilidad, es entendible que estén habituados a ver el dolor a diario, incluso los cadáveres son rutina para ellos, ¡pero no vamos al seguro para vernos con la pelona!, (aunque algunas enfermeras tienen cierto parecido), me hace recordar cierta película en la que gallinazos revolotean esperando que el infortunado moribundo caiga para abalanzarse y obtener mejor presa, a veces uno tiene la sensación que va rumbo al matadero, pareciera que médicos, enfermeras, empezando por el personal de la ventanilla, se frotaran las manos, insalivando de satisfacción, mismo conde drácula, como afirmando: “ya llega nuestra próxima victima”. Allí, en la eterna espera, me pregunté: ¿Por qué no viene a “la cola” el doctor Juan Salas y soporta junto a nosotros este suplicio? será que este señor es inmune a las enfermedades? ¡no!, el susodicho jamás se mezcla con los cholos, él se atiende en exclusivas clínicas particulares de la capital , allí jamás se hacen colas, el es de otra alcurnia, el es “el doctor de la alta investidura”…
Hay personal rescatable, no todo es malo, el Dr. Vallejo, el Dr. Gómez, el Dr. Cueto, y dos jóvenes en ventanilla, el Sr. Guerra y el Sr Ramos,(No pretendo ser machista, pero no observo personal femenino tolerante, cuando debería ser a la inversa), lamentablemente no hay muchos con la paciencia de ellos. Señor Salas, si la incompetencia es una constate en su gestión, entonces renuncie, haga un paso al costado, recuerde que el lema del Partido Aprista es “el cambio responsable”, Ud. Ni quiere el cambio, ni es responsable, aún esta a tiempo, escuche el clamor de miles de asegurados que quieren un trato digno y un mejor servicio y no haga que el acudir a sacar cita, el pasado oscuro del régimen aprista vuelva a nuestros ojos al ver enormes colas de nunca acabar, aquello es un daño físico y también psicológico, vamos a atendernos de los bronquios y terminamos en un estado ansiolítico depresivo, ¿Ud. pretende incrementar los pacientes en psiquiatria?. Medite señor Salas, salga de su “investidura” y baje al llano...
SUGERENCIAS:
1.- Rehabilitar las citas por teléfono, Bajo apercibimiento de declararse por atendido las personas que no asistan a dicha cita, hay que incentivar el cumplimiento y la responsabilidad.
2.- En horas punta debe haber 4 personas en atención constante en ventanilla, con computadora cada uno, al mismo tiempo se debe instalar en red todas las computadoras incluyendo desde el Director General hasta el ultimo personal que cuente con dichas maquinas, si no hay computadores pues repotencien las desfasadas estoy seguro que con un mes de sueldo del “Investido” Señor Salas tienen para equipar 20 computadoras en todo EsSalud
3.- En sala de espera deben instalar mas sillas, las personas deben esperar sentadas, ticket en mano, cuyo número de orden figure en la pantalla del televisor, adecuémonos a la modernidad, la atención se da en ese orden… el usuario se acerca a ventanilla y saca la cita, no hay colas, no hay cansancio y hay mas respeto a los ancianos, niños y madres gestantes.
4.- Señores de EESSALUD, hagan como los grandes hospitales de la capital, dejen el aletargamiento a un lado, descentralicen periódicamente su atención en Mala, Imperial, Lunahuaná por sectores, por etapas, una vez al mes, así se descongestiona la atención en la sede principal, a través de policlínicos ambulatorios.
5.- Señores de ESSALUD hagan charlas preventivas por los medios de comunicación, eduquen en salud al pueblo, como hacer en caso de fiebre, en caso de gripe, de una alergia, practicas de primeros auxilios, hay enfermedades simples que se pueden hacer tratamientos caseros, pero por desconocimiento la gente se aglomera en el seguro, la prioridad debe ser para enfermedades con supervisión medica.
6.- Señor Salas, haga una terapia psicológica masiva a su personal, hay algunos que están completamente estresados y los usuarios somos los paganos, con dicha terapia, el rostro del que atiende siempre será sonriente calmado, comprensivo. Con una frase colérica, una mirada adusta, un trato huraño el paciente se enferma más.
7.- Nombre un comité de seguimiento, de fiscalización, de asesoramiento continuo a pacientes que tengan problemas con el personal, para una solución inmediata a cualquier impasse.
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