AL DIA CON MATICES

CON NOMBRE PROPIO...
Cañete... Valle Bendito...
Escribe: Lic. Ana María Palomino Cueto

En 1991 una joven profesional, llegaba a Cañete en busca de trabajo como tantas otras personas, solo traía una mochila y tantas ilusiones y esperanzas.
En el trayecto de Ica a Cañete, iba diseñando un futuro… trabajaré con adolescentes y les enseñaré muchas cosas buenas… ¡les enseñaré a ser grandes constructores de su propio destino!... y así entre elucubraciones y la realidad, llegué a Cañete, pero en el camino pude leer un letrero que decía con letras grandes y en mayúscula "CAÑETE VALLE BENDITO"… al leerlo me invadió una emoción extraña y agradable, pues sentí que había llegado al lugar indicado… bajé del ómnibus con tanta seguridad que no parecía extraña, me dirigí a la UGEL 08 a solicitar una plaza vacante y con la ayuda de profesores de "Santa Rita de Cassia" y la Directora que desinteresadamente me brindaron su amistad y apoyo pude lograr el objetivo anhelado, mis amigos en Ica no conseguían trabajo y a mí me llegó la resolución de nombramiento un día antes de mi cumpleaños… ¡que bendición!.
Hoy al pasar el tiempo laboro en la Institución Educativa Parroquial "San José" de secundaria en el CPM Cerro Alegre, tengo una linda familia con cinco hijos que brindo a Cañete para agradecerle tantas bendiciones, para que un día lideren su desarrollo y prosperidad y sigo formando jóvenes con esa meta e ideales, reafirmando cada vez mas mi compromiso y agradecimiento a esta tierra que todo me dio... Mis mayores logros, alegrías... ¡Claro! también hemos vivido muchos sinsabores como toda familia, además por malas voluntades. Es sabido que en todo lugar hay gente buena y gente que por falta de amor no lo es, ruego todas las noches por los que hacen daño para que un día se ablande su corazón, limen esas callosidades y encuentren la paz, se den cuenta que son hijos de Dios y que merecen amar al prójimo, que la vida no es venganza, no es rencor, que la vida hay que mirarla de otra manera, porque aquel que hace daño, no sólo lo proyecta a los demás sino también a sus hijos, que aprenden a amar o no a través de las manifestaciones de sus padres, que aprenden que la vida es un constante acecho dispuestos al ataque y a la venganza, no es así, tenemos que aprender a vivir de otra manera, aunque nos vaya mal… por que la esperanza , la fortaleza y la fe no deben perderse nunca, porque jamás aprenderías a valorar la simple sonrisa de un niño, ¡que no haría por arrancarle la sonrisa a un niño que llora!
Merecemos algo mejor y en la medida que cambiemos lograremos mejores resultados, es necesario entender que somos responsables de ese mañana que todos esperamos sea mejor, pero sino hacemos mayores esfuerzos es poco lo que vamos a lograr. Cañete se merece algo mejor… veamos, una naturaleza dispuesta a brindar desarrollo sostenible, recursos turísticos que nos han dejado los que nos precedieron, grandes valores cañetanos cultores del arte, la música, el deporte, intelectuales de nivel, amas de casa luchadoras, y niños con ilusiones, con esperanzas ¡como negarles el derecho a ser mejores! ¿Con que valor? ¿Es que es necesario verlos destruidos, para recién acudir en su ayuda?... ¡No!... Cañete es un Valle Bendito ¡Si Señor!... aprendamos a amarlo y entregar de nosotros lo mejor, tenemos los recursos para triunfar, tenemos a los hombres que necesita, solo nos falta la vocación y la entrega, además el valor para ir mas allá del deber… llegar a esa heroicidad que reclama y exige nuestra historia, ¡no seamos simples y cotidianos, seamos extraordinarios! Luchemos por nuestro desarrollo, aportemos con buenas ideas, seamos vigilantes de su proceso y aprendamos a trabajar no por cumplir sino con el deseo de contribuir, de cambiar, y así daremos mas cada día y solo así alcanzaremos nuestros sueños, somos parte del todo, también somos la solución a los problemas, fortalezcamos nuestra visión y mejoremos nuestra identidad. ¡ARRIBA CAÑETE!