IMPULSO DEL GOBIERNO CONTRA LA ACTIVIDAD DOCENTE...
Escribe: Leydis Joaquín Atencio
Actualmente, la docencia es la actividad fundamental de las universidades y de los Institutos Superiores Pedagógicos. Sin embargo, esta práctica adolece de una serie de carencias y limitaciones, entre las que podemos mencionar la marginación por parte del gobierno aprista con sus partidarios nombrados en esta profesión en la década de los 80 con una baja profesionalización docente; por otro lado, el excesivo peso de la carga horaria que pide el gobierno sin pensar en los niños y niñas, el inequitativo acceso a los recursos didácticos y a nuevas tecnologías para la educación en las Instituciones Educativas, espacios insuficientes e inadecuados y, de particular importancia, condiciones laborales que no cubren del todo aspectos esenciales en materia de seguridad laboral y social.
El docente es el sujeto articulador del proceso educativo. Para el mejor desempeño de esta función es necesario que cuente con los elementos formativos y materiales necesarios, adecuados y suficientes, con el fin de establecer las coordenadas que definen la calidad del aprendizaje.
Debemos orientar el trabajo docente hacia una visión más amplia en la cual la biblioteca, el laboratorio, el taller, el café, el hogar y el trabajo, sean espacios donde los estudiantes cuenten también con procesos educativos a distancia o en línea, los cuales pueden tener un clima de trabajo individual, en equipo, grupal o interactivo.
La educación para que sea efectiva, debe constituirse sobre la base del reflejo de las necesidades e intereses de los niños, niñas, padres de familia y de las políticas institucionales y sociales; todo ello, se dirigirá al perfeccionamiento de las acciones que realiza la entidad para satisfacer las necesidades de sus usuarios, lo que, en última instancia, redundará en el nivel de satisfacción o bienestar de la comunidad en relación con el trabajo institucional.
La adecuación de la educación permanente falla con frecuencia por razones tales como: se enfatizan los conocimientos mientras se excluyen las habilidades, escasa economía de los padres de familia de zonas rurales, niños y niñas que caminan hasta 2 horas para llegar una escuela, se describen los avances recientes en zonas urbanas sin considerar los recursos disponibles en las zonas rurales o, simplemente, tales actividades no se fundamentan en las necesidades reales de la sociedad y prioridades de éstas, por lo tanto resultan de escaso o de ningún valor que el gobierno aprista debe prestar atención.
La educación continua es un componente vital de la vida de la organización. Constituye la vía principal para mantener o perfeccionar la calidad del trabajo que realizan sus miembros. Es, a su vez, una vía importante de adaptación o de adecuación de la actividad institucional al cambio y desarrollo social.
El desarrollo de un proceso de educación permanente requiere clara conciencia de que no se trata de una actividad marginal, ni de un adorno, ni de un mecanismo de descanso o refresco del personal. Se trata, de una de las herramientas más eficaces de cambio estructural, capaz de inscribirse nada menos que en la cultura institucional, local, regional y nacional.
Queridos, colegas, es hora de frenar este impulso que tiene el gobierno de arremeter contra el magisterio nacional, echándonos la culpa de su mal manejo económico, una política educacional nefasta e inadecuada. Busquemos la unificación y luchemos por nuestros derechos ya que por ello hemos estudiados y seguiremos estudiando durante la vida
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