COLEGIO «DIONISIO MANCO CAMPOS» SE PREPARA PARA CELEBRAR A LO GRANDE SUS BODAS DE ORO

Escribe: Marcelino Agapito Manco

La celebración de las BODAS DE ORO DEL COLEGIO EMBLEMÁ-TICO  «DIONISIO MANCO CAMPOS» DE MALA – CAÑETE 
está muy cerca. Las promociones empiezan  a trabajar y también a ilusionarse con el reencuentro.
Debo ilustrar y aclarar a la opiniòn publica para no corromper su rico historial que el año de su  fundación fue en 1962 como colegio municipal y con la daciòn de la ley Nº 15633 del 01 de octubre de 1964 le permite adoptar el nombre de «Dionisio Manco Campos».
Han pasado 50 años y legiones de alumnos esperan volver a  encontrarse en esta fecha  simbólica de irrepetible magnitud, ya se observa algunas reuniones previas de coordinaciones de diversas promociones, lo que augura el éxito por anticipado del acontecimiento.

TRIBUNO DE LA EDUCACIÓN
A su rica biografía, se incluye sus dotes de Maestro, Escritor, Poeta y Periodista, por cosas del destino el nombre Dionisio es de origen griego que  significa, «EL QUE CONSAGRA A DIOS EN LA ADVERSIDAD» y vayan a saber las vicisitudes que pasó este ejemplar hombre; en Mala la institución emblemática de educación secundaria perenniza su memoria llevando su nombre I.E.P «DIONISIO MANCO CAMPOS», y es la casa que cobijó a generaciones, sembrando amistades que perduran con el tiempo, pensamientos que duermen y se convierten en hermosos sueños al despertar... aún se escuchan las voces del himno vibrante, diciendo:  «Una ruta de luz al futuro, va trazando la acción juvenil, de esta pléyade noble y pujante, que es promesa de un nuevo Perú, el valle de Mala fecundo y sereno, nos brinda el aliento de su corazón y el limpio recuerdo del gran Manco Campos enciende en sus mentes fulgor e ideal, Florecen las almas de los estudiantes, en pos de la ciencia que da la verdad y prende su llama purificadora, la sana conducta que da la virtud, fervor en la siembra de grandes ideas, palpitan en las aulas de nuestro plantel, amor al trabajo, cariño al estudio, son frutos dilectos que ofrecen su afán, con fe en el mañana se elevan las voces, vibrantes y claras de la juventud, son himnos sonoros de mancocampinos, llevando la antorcha del nuevo Perú»…es el alma que se vivifica mucho más, es el recuerdo de reconocimiento al espléndido Maestro que derramó sabiduría, esperanzas y fue el guía  espartano que secundó al padre, al gran  guerrero, que se convierte en héroe cada día para educar a sus hijos; al amigo (a) inolvidable, al que no se le ve durante muchos años; hoy han progresado muchos de ellos, ocupando cargos importantes en la administración pública y privada, acrecentaron su familia y entienden que hay que dar gracias a DIOS, porque ahora si son un referente en la sociedad, es el momento preciso para  dar un gesto de gratitud a su alma mater, y si es posible que en el momento del reencuentro sirva para reunir voluntades y apoyo entre compañeros para caminar siempre como un solo puño, devolviendo todo aquello que se recibió un día gratuitamente y fructifiquen en las nuevas generaciones.

BIOGRAFÍA DEL MAESTRO Y AMAUTA DIONISIO NEPOMUCENO MANCO CAMPOS
Nació el 8 de mayo de 1914, hijo de Don Eusebio Manco Huapaya y Adelaida Campos de Manco, estudió en la Escuela Elemental Primaria N° 4515, brillante alumno de la casta de intelectuales maleños, sus compañeros lo recuerdan por su sobria inteligencia; la educación secundaria lo realiza en el Colegio Rector de La República «Guadalupe» de Lima, esta perseverancia por el estudio fue compartida con extremada bizarría y patriotismo libertario que había aprendido desde la niñez - fue testigo de la huelga de los indígenas de 1919 en la Hacienda la Rinconada de Mala – todos estos acontecimientos se iniciaron en la calle Real donde él había nacido, fresco estaba las narraciones de la primera guerra mundial; fue practicante de la verdad, como único bien del hombre y comprendió que tenia que seguir estudiando para superar la ignorancia, a menudo recitaba la frase «si Cristo fue carpintero, Esopo esclavo, Demóstenes tartamudo y llegaron a ser grandes, yo no puedo ser la excep-ción», tenía la primacía de valores y virtudes formadas en su hogar; logra ingresar a la Facultad de Educación de la Universidad Católica del Perú, antes de graduarse enseñó en la Escuela Japonesa de la calle Zamudio, el Liceo Lima (conocida luego como GUE «Elvira García y García») se graduó en 1942 siendo destacado luego al Colegio Nacional «Toribio Casanova» de Cutervo (Cajamarca), Dionisio de su propio peculio apoyaba a los mejores alumnos para que vengan a estudiar a  Lima, luego el Ministerio de Educación le encargaría fundar el Colegio Nacional «José Gálvez en Cajabamba, donde estuvo hasta 1950 y en cuyo lugar  presentó notables funciones literarias, al igual que en los Auditórium Teatrales de Trujillo y Chiclayo donde dejó impreso en la memoria de sus contemporáneos el esplendor de sus obras, laboró también y dejó su paso imborrable en el Colegio «Abel Alba» de Contumazá.

SU VOZ GENIAL LE DABA SINFONÍA ESTUDIANTIL
En 1958, fue trasladado al Colegio «Gabriel Moreno» de Canta y en el segundo semestre trasladado al Colegio «José Buenaventura Sepúlveda Fernández» de Cañete, siendo nombrado Director en 1960, desde aquí el destino lo predestina a mostrar sus mejores emociones hacia la tierra que lo vio nacer y del cual sólo lo había alejado la apostólica vida magisterial, que no tiene patria, ni frontera cuando de servir se trata, el mezquino tiempo, la ignorancia de algunos, el olvido de otros, la incomprensión irreconocible de la historia, no podrá borrar de las retinas y los latidos de cada estudiante el nombre del Amauta Dionisio Nepomuceno Manco Campos, que traspasó su labor de educador compartiendo con la de escritor, poeta y palmarés de periodista, a decir del ex parlamentario Edmundo Murrugarra Florián quien compartió, entre tantos, la sabiduría del Maestro.

UN VERDADERO APÓSTOL DE LA EDUCACIÓN
El naciente colegio del cual era su ideólogo, necesitaba apoyo y allí estuvo él, para entregarlo todo, gratuitamente, su tiempo, el tener que interceder ante sus colegas para que vengan a enseñar a Mala, costeándoles  pasajes, alimentación, hospedaje, incluso brindándole posada en su propio hogar; como Director del «Sepúlveda» colabora mandando profesores, la herramienta principal para poder educarse, los que compartieron el mérito y no escatimaron esfuerzos, ni peculio, para la construcción de éste edificio, ya tienen un espacio en el altar de la historia y han escrito sus propias páginas; había que comenzar a construir, poniendo los cimientos, cuando no hay nada, sólo te encuentras con el latir de tu corazón y él quería más para su pueblo, precisamente en la primavera de ese año de fundación del Colegio Secundario Mixto de Mala, las flores guardarían para siempre, en el aroma de su jardín, la figura del gran Dionisio Manco Campos, que murió un 27 de Setiembre de 1962, lo había dado todo y podía ya dormir tranquilo en el panteón de los Amautas, y desde el cielo seguir enseñando al lado de Dios como hombre justo, fue a todas luces el año mas intenso, las nuevas generaciones que recorran el Perú verán siempre flameando y coreando su nombre, será el refugio en que han de descansar las almas juveniles y el patrón a seguir de sus profesores, si alguno de ellos lograra alcanzar su devoción, ya estará cumplida la tarea.
Felicito y agradezco a quienes con gran dedicación e inspirados con el espíritu mancocampinos hicieron posible que el Estado Peruano recono-ciese por ley Nº 15633 del 01 de octubre de 1964, para que el colegio municipal adoptara el nombre de «Dionisio Manco Campos» en homenaje a tan insigne maestro, escritor, poeta y periodista maleño. Dionisio Manco Campos hombre amoroso, casado con Doña María Ledesma Izquieta de Manco, dejó 5 hijos Dora, María Inés, Aurea Estela, José y Deny Adelaida, quienes con humildad se muestran orgullosos de honrar el nombre de su padre, ellos comprendieron que desde el momento de su muerte Don Dionisio, ya no sólo le pertenece a ellos, sino que se transformó en patrimonio de esta tierra que lo vio nacer, www.poderpolitico.info de esta manera contribuye e insta a las generaciones presentes y futuras a estudiar, solo así diremos que la misión del Amauta estará cumplida. GRACIAS MAESTRO.
POST DATA: Esta crónica fue escrita en el año 1993, con motivo del aniversario institucional, aquel año laboré en éste prestigioso colegio del cual guardo las mejores emociones, un saludo para todos, especialmente para la Promoción María Reich Newman, Sección del 5to «B»  de quienes fui su Profesor-Tutor. Fue re-publicada el 17 de junio del 2010 en www.poderpolitico.info.
Un fuerte abrazo.