Directora Abogada Rocío López Luna
DIRECTORA DEL CENTRO DE CONCILIACIÓN «MADRE DE CRISTO CONCILIADORA»
Av. Benavides 799, 2do Piso, San Vicente, Cel. 999 210 236, T. 01 3005603
En este espacio trataremos casos de la vida real ADAPTADOS a nuestra realidad cañetana, y ello, a fin de acercar al pueblo UNA JUSTICIA REAL de una manera rápida, económica y efectiva. En esta oportunidad me enorgullece mencionar a un colega que honró el quinto mandamiento de Couture: SE LEAL.
DÉCIMO CASO:
En Lunahuaná, una anciana sin hijos, ocupó parte del terreno de una señora radicada en Cañete, para vender pan. La propietaria, muy molesta porque deseaba conseguir un préstamo en el Banco para construir un hotel, nos solicita su Desalojo inmediato. A la audiencia acuden sus respectivos abogados.
Solicitante: «No quiero saber qué se le ocurrió a la señora para hacer lo que hizo, pero yo tengo todos los papeles en orden, y deseo que se retire en el acto»
Invitada: «Ahora no te interesa y ni me conoces, ¿no te acuerdas quién te dio leche cuando falleció tu madre que en el cielo esté?»
Dra. Rocío: (A la solicitante) «¿Se conocen?»
Solicitante: »Sí doctora, lo que dice es verdad, es mi madre de leche, su hijo había nacido muerto, y mi madre lo hizo poco después de alumbrarme. La verdad es que me da pena, pero yo deseo ese préstamo, pues mi tercer hijo ha ingresado a la universidad y mi sueldo de profesora no es suficiente»
Dra. Rocío: (A la solicitante) «¿Cuándo piensa comenzar con la construcción?»
Solicitante: «Por lo menos en 3 meses, eso también tiene su trámite…, la construcción tomará un buen año de tiempo»
Dra. Rocío: (A la solicitante) «¿y ya tiene un guardián?»
Abogado de la Solicitante: »Sra. Conciliadora, aquí las cosas están claras, las partes no se entienden, así que, por favor, emita un Acta de Falta de Acuerdo»
Dra. Rocío: (A dicho abogado): «Colega, permítame recordarle la ley, esto no es un juicio, y aquí las partes deciden directamente, yo no decido sino propongo soluciones».
Invitada: Mi abogado me ha dicho que vaya a juicio, así que ¡no hay acuerdo!
Abogado de la invitada: «Sra. Usted no me dio los detalles que ahora tengo a la vista, ese juicio de Desalojo lo va a perder, y yo sé que usted es de bajos recursos, escuche a la Dra. a ver qué dice».
Dra. Rocío: «Gracias doctor. Propongo que la señora trabaje en guardianía a cambio de poder vender su pan, durante el año que dure la construcción del hotel»
Solicitante: «La verdad que no había pensado en eso, bueno, igual necesito una persona de confianza, y la señora es correcta, estoy dispuesta a darle S/. 500.- mensuales».
Invitada: «Gracias hija, ¡yo sabía que no me habías olvidado!»- dijo llorando de alegría
Abogado de la invitada: «Eso va a ser lo mejor señora, yo podría patrocinarla en el juicio, pero, DEBO SERLE LEAL, además la conciliación es fantástica, ¿verdad?»
Nota de la Dra. Rocío: Con el sueldo que percibió la invitada adquirió un puesto en el mercado luego de terminada la construcción. Ambas partes son nuevamente amigas: ¡LA CONCILIACIÓN VIVE!
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