PRIMEROS EN CORRUPCIÓN, ÚLTIMOS EN EDUCACIÓN...

Escribe: Edwin Paypay Román

Enterarnos del nivel de la corrupción y los niveles educativos en nuestro país (Perú) resulta alarmante y de honda preocupación. Pues, aunque parezca una exageración podemos decir que somos los «primeros en corrupción y últimos en educación», y no lo digo yo, sino que la realidad y los estudios sobre estos aspectos confirman esta dura realidad.     
Transparencia Internacional es una institución encargada de realizar estudios sobre la corrupción en los países del mundo y, el Ministerio de Educación, la encargada de evaluar el nivel educativo de nuestros hijos. ¿Cuáles son sus resultados?... La primera emitió su último informe denominado «Índice de Percepción de la Corrupción 2011» donde consideró que el Perú ha elevado su nivel de corrupción. Hemos superado a Chile, Cuba, Brasil, Uruguay y otros países del Continente, comparados casi con México, Colombia, Paraguay y Bolivia, por lo que podemos decir que somos los primeros, pero de corrupción.
A diario podemos observar una serie de denuncias y descontento por los actos de corrupción en nuestro país, prácticamente todos los niveles y entidades púbicas están inmersos en la corrupción: Educación, Salud, Pesquería, Minería, Transporte, Municipios, Gobierno Regionales e incluso quienes deben combatirla: Policía Nacional,  Ministerio Público y el Poder Judicial, salvo honrosas y honorables personalidades que trabajando en estas corrompidas dependencias se sacuden y combaten esta podredumbre llamada corrupción.
Cañete no es ajeno a esta realidad, el caso FINVER, compras sobrevaloradas en los colegios, comisiones por las obras Públicas que  bordean los 15% y 20% del total y los casos de telefónica en varios distritos de nuestra provincia reflejan la gravedad de estos actos. De igual forma, el resto de nuestro territorio patrio se encuentra inmerso en tales hechos, si sumamos todas las comisiones (soborno) que se dan a diario en todas las obras y compras sobrevaloradas podemos obtener miles de millones de soles que se mueven a través de este negocio rentable «Corrupción» de donde muchos viven de ella, laborando en el sector público a plazo determinado y rotando de entidades a entidades. Un tiempo laboran en tal lugar (Municipio, Región. Ugels, etc.) y después en otro (Región, Poder Judicial, Fiscalía, Ministerios, etc.) y así sucesivamente.
En cuanto a la educación nos encontramos entre los últimos lugares, el Ministerio de Educación, ha realizado la evaluación censal a los estudiantes de todos los colegios de nuestro país y los resultados son alarmantes, nuestros alumnos no aprenden lo que deben aprender; en matemáticas el 51% no alcanza los logros esperados y en comunicación cerca del 25% tampoco alcanza el objetivo planteado, ello se repite en las demás asignaturas; por ello, en las competencias internacionales nos ubicamos en la cola de América comparado casi con los países del África.
El Ministerio de Educación, las Ugeles, los Gobiernos Regionales y los Municipios, en su mayoría, no establecen una política seria en materia educativa, no obstante, que cuentan con altos ingresos a consecuencia del crecimiento económico; por el contrario, ven en estos pliegos una forma de obtener ventajas económicas «A MAYOR PRESUPUESTO, MAYOR CORRUPCIÒN» así mismo, ventajas políticas, lo que se invierte debe ser para ganar votos y para seguir postulando; no les importa la educación de nuestros niños y niñas, solo la educación de sus hijos, matriculándolos en colegios y universidades particulares.
Tampoco al gobierno le interesa combatir la corrupción y la mala educación, caen fácilmente ante el poder y el dinero. Los órganos de control que no controlan casi nada gozan de sueldos que son pagados por la autoridad a quien tiene que investigar ¿Cómo investigar a quién me paga? es un claro ejemplo de cómo el sistema alimenta y permite la corrupción, ni qué decir de los fiscales penales, salvo honrosas excepciones, en cambio al ciudadano común y corriente es impecablemente denunciado y sancionado por la comisión de un delito menor; pero entre ellos, aplican el llamado «espíritu de cuerpo» «cerrar filas» y la férrea represalia contra los que sacan a relucir sus malos actos.                       
La corrupción se ha elevado y la mala educación también, lo peor que esta pasando es que gran parte de la población es tolerante a estos actos, existe mucha indiferencia que nos hace ciego ante la realidad, si no levantamos nuestros ojos y miramos a nuestro alrededor seremos sus cómplices. Es urgente que tomemos conciencia de estos males, existe una relación directa entre mala educación y corrupción, sino miremos las cárceles y la delincuencia en todas sus variantes (Secuestros, robos, chantajes, asesinatos, violaciones).   Mejoremos en educación y se reducirá la corrupción. No permitamos nuevamente volver a los 90, aunque así está sucediendo.   
 Si bien la problemática es aguda, no es imposible de resolverla, ya muchos países han demostrado salir adelante, pues queda en nosotros tomar las riendas de nuestro destino y ser protagonistas del cambio.
¡Basta de corruptos y Corruptas! Si estamos pisando fondo, al final del túnel viene la luz, entre los males surgirá el bien y los derrotará. No sentirse agobiado por el pesimismo y tener la esperanza de un mundo mejor es la fe que debemos albergar, si bien la lucha es ardua y perenne, su resultado nos aliviará y fortalecerá, no hay mal que dure cien años, ni cuerpo corrupto que lo soporte. Se avecina el día, pues la justicia está abriendo su propio camino.