Que el año 2016 sea diferente al 2015... que los deseos incumplidos se vuelvan realidad... y sobretodo, con la esperanza de un año nuevo lleno de prosperidad y éxito en la salud, dinero y amor, millones de peruanos y en especial los cañetanos celebramos la llegada del 2016 en medio de copas de champán, fiestas, abrazos, cábalas y un espectacular cielo iluminado por los fuegos artificiales.
Un ambiente de fiesta inundó casi todos los hogares y también los diversos establecimientos de diversión que se habían preparado para recibir a miles de cañetanos, cuando la cuenta regresiva llegó a su fin y con ello, se daba inicio al primer día del año.
Con copa en mano y provistos de un pequeño racimo de doce uvas, las personas pedían al ingerirlas un deseo por cada mes.
Asimismo, podía observarse a personas que portando maletas daban la vuelta a la manzana para así asegurar los tan ansiados viajes que anhelan concretar.
Lo mismo sucedió con quienes en medio de saludos, daban el primer abrazo del año a personas del sexo opuesto para encontrar el amor... o el primer beso del año para reafirmar el amor que los une.
Además, quienes tanto ansían la prosperidad económica optaron por beber una copa de champán con un anillo de oro dentro, comer lentejas y cambiar su ropa interior antigua por una de color amarillo, mientras que aquellos que deseaban un cambio de energía, quemaban papeles donde estaba escrito todo lo negativo del 2015.
El cielo no fue la excepción durante las festividades, pues este se llenó de color y algarabía cuando niños y adultos en plena vía pública encendieron fuegos artificiales en señal de bienvenida al año que se inició... mientras que otros adoptaban una tradición que se busca desterrar por seguridad, que era la de quemar al año viejo... por ello, muchos en medio de sumos cuidados, mantuvieron la tradición y las calles se vieron llenas de muñecos que se quemaban en medio de cohetes y cohetones.
EN LAS PLAYAS
Otros prefirieron acampar en las playas cañetanas... fueron miles, los que estuvieron entre Chilca y Cerro Azul... las fogatas que los alumbraban,en medio de unas cuantas copas y diversión, fue el marco especial que prefirieron para recibir el año 2016.
Mientras en casa, como ya es tradicional en nuestro país, en la mayoría de los hogares se sirvió la cena de Año Nuevo con panetón y chocolate... con pavo, lechón, gallina o pollo... sus ensaladas y el infaltable champán... pero también muchas personas optaron por recibir el 2016 en algún local de diversión para recibir el 2016 con energías renovadas.
Fue como todos los años un recibimiento espectacular... y todos esperamos ansiosos que el 2016, sea completamente diferente y sobretodo renovador.
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