AL DIA CON MATICES

EL ARGUMENTO DE LA FAJA MARGINAL...
Para desacreditar y desinformar a las peticiones de obras de defensa ribereñas con calidad...
Por: Crisanto Laura Cueva

Desde que se instalaron las nuevas autoridades Regionales y Locales en este 2007, algunos funcionarios y allegados a estos sacan a flote el tema de la pérdida de faja marginal en el río. Al parecer esto es en respuesta a los constantes llamados de atención y presentación de propuestas desechadas que los responsables de las obras de defensas ribereñas no quieren concertar.
El problema de los desbordes en el río, no es por la pérdida de la faja marginal necesariamente. Esto es un problema nacional, que ni el propio gobierno ni el Congreso pueden solucionar. Realmente es un problema social ambiental. Pero no es el único problema o causa de que el río se desborde.
A continuación enumero en orden de prioridades los problemas, por lo que el río se desborda y esto porque desde hace más de 30 años observamos estos detalles y se los presento a una y otra autoridad que ingresa para que se revierta la situación:
a) El fenómeno climático de El Niño; b) La excesiva colmatación del cauce de muchas centurias; c) La pérdida de faja marginal y el manejo antitécnico de la cuenca; d) La tala salvaje indiscriminada de bosques y el sobre pastoreo excesivo; e) Las obras de defensas ribereñas provisionales, precarias y sin sustento técnico (geólogos, hidrólogos y sociólogos); f) El ciclo vicioso y bastante conocido de la gestión de los trabajos de prevención o de emergencia; y g) La falta de una real participación ciudadana.
Es sorprendente que el río desde el tramo de Boca del Río hasta la Fortaleza de Ungará tenga un cauce variante. Hay zonas que tiene un ancho de 80 mts. (Cornelio) y otros de 300 mts. (Boca del Río) cuando se carga promedio en época de fenómeno de el Niño oscila aproximadamente en 250 m3/s y su carga máxima en 920 m3/s (1972), lógicamente que el río se tiene que desbordar. Así también en zonas como Lúcumo el cauce se ha ampliado abusivamente hasta los linderos de los predios agrícolas, eliminándose grandes áreas de bosques intangibles efectuadas por la propia autoridad de aguas (1997).
También es cierto que últimamente se están perdiendo grandes áreas intangibles de los pocos que aún quedan como los ocurridos con el Sr. Queirolo, Daniel Salvador, Gregorio García y muchos más en ambas márgenes, que las autoridades de la cuenca no pudieron hacerlos respetar. Tampoco los problemas en el río no son solamente de fajas marginales. Hay problemas de contaminación con agrotóxicos de extractores ilegales, arrojo de basura por los centros poblados, camiones del mismo municipio de Imperial y Provincial, extracción de materiales de construcción informalmente y arrojo de los desagües de muchos distritos de la Provincia de Cañete y Yauyos. Todos estos se resumes hasta ahora en el tristemente término real «El Río es una Tierra de Nadie».