AL DIA CON MATICES

PUNTO DE VISTA
DISTRITO ELECTORAL Y EL OTRO PERU...
Escribe Abog. Aldo Beretta - Reg. CAL 4767

Estimados señores:
Me es muy grato escribirles desde la ciudad de San Clemente, estado de California, Estados Unidos, donde vivo desde hace muchísimos años.
Por interpósita persona he tomado conocimiento de su periódico y, me parece sumamente interesante. Allí, tuve la oportunidad de leer el artículo que han consignado acerca de la creación de un distrito electoral para los peruanos en el exterior.
Al respecto, me permito hacerles llegar el artículo que he escrito sobre este particular, agradeciéndoles tuvieran a bien publicarlo en vuestro periódico, pues somos muchos los peruanos que vivimos fuera, y que consideramos al proyecto que se pretende sancionar, como una medida descabellada y que, por ende, no debería prosperar.
En mi opinión, se trata sólo de un injusto derroche de dinero, que bien podría ser utilizado para paliar en algo la perversa pobreza en que se encuentran más de 13 millones de peruanos.
Me valgo de la oportunidad para expresarles las expresiones de mi mayor consideración.
Atentamente
ALDO BERETTA - DNI 06489240
San Clemente, CA
Distrito Electoral y El Otro Perú
La Comisión de Relaciones Exteriores del Congreso en sesión fechada el 18 de junio pasado, expidió el texto sustitutorio de la ley que crea los Distritos Electorales para Lima-Provincias y para Peruanos Residentes en el Extranjero, así como el establecimiento de medidas para la protección de sus derechos, el mismo que recomienda sea aprobado por el pleno.
Al margen de cualquier consideración o controversia sobre si este proyecto debe ser visto por la Comisión de Relaciones Exteriores o la de Constitución, lo cual se dilucidará en su momento, debo manifestar mi profundo desacuerdo por lo que se pretende llevar a cabo.
En primer término, cuál es la razón o justificación para esta medida. ¿Ha sido consultada acaso alguna vez la colectividad de peruanos que residimos en el exterior sobre si necesitamos, queremos o deseamos tener algún congresista que nos represente o defienda?. Me parece que no.
Revisando la Exposición de Motivos del aludido proyecto, encuentro que se habla entre otras cosas, de que "uno de los aspectos más graves que pesa sobre los ciudadanos peruanos en el extranjero es la limitación de sus derechos políticos, su incapacidad para influir en la sociedad y en el poder político peruano".
Sobre este particular, me pregunto: ¿Por qué el legislador llega a esta conclusión?; de dónde saca que los peruanos del exterior nos sentimos limitados en nuestros derechos políticos?; O que estamos deseosos de ejercer algún tipo de presión en la sociedad y en el gobierno?. No hay nada que pueda ilustrarnos sobre el por qué de lo anterior.
En puridad, es verdad que los que vivimos fuera tenemos problemas, pero también es cierto que éstos pueden ser resueltos sin tener que contar para nada con la intervención de algún nuevo representante
y menos que sea congresista. Y, no lo digo en término peyorativo.
Nosotros tenemos problemas de otra índole: por ejemplo, el del pésimo servicio que brindan las oficinas consulares; la absoluta carencia de protección y asistencia que por mandato de la ley debe brindarnos las oficinas consulares; el absoluto desinterés de las oficinas consulares para trabajar por la promoción de nuestra cultura, así como la inserción de los connacionales en el país al que llegamos; el absoluto desinterés de las oficinas consulares para promover la imagen de nuestro país y de nuestra colectividad en la jurisdicción de dicha oficina; el absoluto desinterés de las oficinas consulares para promover actividades comerciales que rindan beneficio a nuestro país.
Estos, son algunos de los problemas o dificultades por los que venimos atravesando desde hace muchísimos años, sin que el gobierno, o específicamente, el Ministerio de Relaciones Exteriores
haga algo por remediarlos.
La solución existe. Tenemos un Reglamento Consular que con claridad meridiana señala las funciones y obligaciones a las cuales se encuentran sujetas las oficinas consulares. Empero, en la práctica, dicho reglamento sólo sirve para ser burlado. Y, reitero, Relaciones Exteriores permanece impasible ante la
ignominia que tenemos que soportar los que vivimos fuera.
Por lo demás, los peruanos en el exterior o "El Otro Perú", no tenemos mayores problemas, por lo que este proyecto resulta ser descabellado y por ende, no debería prosperar.
Lo mismo podría decirse del artículo 2º del proyecto, por el que se crea la "Comisión de Protección de los Derechos de los Peruanos Residentes en el Exterior". Si el Distrito Electoral referido en líneas arriba constituye una medida descabellada, la creación de la comisión antes citada es un acto que no tiene pies ni cabeza. ¿Cuál es la razón para crear un organismo cuyas funciones en la actualidad corresponden ser realizadas por el Ministerio de Relaciones Exteriores. No se ha percatado el legislador que se está incurriendo en duplicidad de funciones?
El proyecto habla de la implementación de una página web y habilitación de una línea telefónica gratuita en el Ministerio de Relaciones Exteriores y eso ya existe. El teléfono de emergencia que existe en cada uno de los consulados -por mandato de la ley- no produce ningún resultado positivo, pues ni siquiera lo contestan y hasta tienen el sistema de grabadora. ¿Entonces, para qué sirve?
Si en verdad quieren proteger al peruano del exterior, sólo tienen que declarar en reorganización las oficinas consulares y colocar en ellas a personas debidamente capacitadas, que tengan formación
jurídica y con verdadera vocación de servicio.