17 octubre 2007

PUNTO DE VISTA...
SEXUALIDAD AÚN ES UN TEMA TABÚ...
Escribe: Lic: Ana María Palomino Cueto

Para muchos adolescentes hablar de su sexualidad es casi imposible, sus padres evitan hablar directamente del tema, y pensa que son ellos quiénes son los encargados de informarlos y prevenir de una serie de problemas que los afectan.
Estos problemas van desde las infecciones de transmisión sexual a los embarazos adolescentes y abortos. Un 42% de adolescentes entre 11 y 17 años de Lima y Callao sabe poco o nada sobre sexualidad, lo mismo se estima en Cañete. Situación que deriva, en mitos y tabúes en estos tiempos en que la globalización ha roto barreras en la sociedad de la información; sin embargo, los padres quienes son los mas indicados quizás ignoran la manera mas adecuada de abordar este tema y solo se limitan a responder a las posibles influencias que reciben sus hijos, aceptando o rechazando, o cuando sucede lo inesperado hasta votan a sus hijas o hijos de la casa. Lo que ellos necesitan es amistad, apoyo y comprensión paterna para tomar decisiones. Hay que comprender: "Los adolescentes están en una etapa de transición en cuestión de autoestima, identidad, modelos, autoridades. Viven en un momento crítico. Intentan reafirmar su identidad, ganar respeto, confianza y libertad, y luchan por lograr autonomía económica y emocional". Y en muchos casos se equivocan por que los más cercanos son los amigos y no siempre son los mejores consejeros. Por ello es necesario dar algunos consejos:
No se deben rehuir, ni prohibir las preguntas que hacen los niños sobre este tema.
Cuando los padres hablan con delicadeza sobre los temas de la sexualidad humana se propicia también un fortalecimiento de grandes vínculos de unión con sus hijos.
Para ser realmente eficaces, hace falta una enseñanza personal y graduada, para que los hijos vayan descubriendo, poco a poco las verdades acorde con las circunstancias que se vayan presentando.
En la actualidad se ha exagerado de tal manera la educación sexual reduciéndola a lo biológico e intrascendente, como mero instinto sexual y no ligado a los sentimientos, a la capacidad de sentir y expresar atracción, amor, afecto hacia el otro y a la necesidad de comunicarse afectiva, emocional y corporalmente con alegría, amor y placer, sobre todo con respeto entre ambos.
La modernidad se está envolviendo en el manto del goce, del placer, del instinto sexual, lo vemos, lo escuchamos y no es ajeno a nuestra realidad.
Los padres se están olvidando que son formadores y que lo primordial que deben educar es en la "Voluntad y el carácter", que el joven aprenda a tomar sus decisiones, que desarrollen su capacidad crítica, su visión de futuro. Todo esto se forma desde pequeños; cultivar el valor de pensar o discernir, que sean amables y respeten normas, que se adapten a los cambios con normalidad y sobre todo que aprendan a amar.
El amor implica renuncia, entrega y compromiso real, no me refiero a que estén probando una y otra experiencia con quien resulta mejor, mientras se va desvalorizando y perdiendo a sí mismo. Lo ideal es llevar un enamoramiento correcto y que esa relación culmine en una unión indesligable, hasta que la muerte los separe: el matrimonio.
NO OLVIDES QUE:
Cuando el hombre actúa indebidamente se degrada y él mismo sufrirá las consecuencias, las cuales también repercuten en otros seres inocentes haciéndoles sufrir.
La reproducción humana debe ser ordenada, racional, por amor a partir del matrimonio, fundado en una familia, a través de un vínculo indisoluble, afirmado públicamente y abierto a la vida.
La familia constituye más que una unidad jurídica, social y económica, una comunidad de amor y de solidaridad, insustituible par la enseñanza y trasmisión de valores culturales, éticos, sociales, espirituales y religiosos, esenciales para el desarrollo y bienestar de sus propios miembros y de la sociedad.

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