¿EL AGUA O EL ORO?... NO AGUA Y ORO

Escribe: Crisanto Laura Cueva

Los pueblos de la serranía a nivel nacional les han dicho al gobierno y a las mineras un NO rotundo a la minería, a traves de paros y protestas sangrientas.
Le han dicho NO A LA CONSTITUCION FUJIMORISTA que hoy aplauden todos a traves del modelo económico de libre mercado. Han votado por un cambio del sistema neoliberal. En la práctica, nadie quiere entenderlo así, nadie escucha el clamor de las masas y de los pueblos excluidos.
Pero, Ollanta Humala ha dicho hoy (quizás cansado y hastiado de tanta protesta minera) que los proyectos mineros se harán si o si, y el mensaje para un país unido es AGUA Y ORO y NO ORO O AGUA.
Con esta afirmación define frontalmente la línea de apoyo total a las mineras y en contra de las comunidades de la serranía. Desvirtúa, oculta y maquilla su predica electoral que propugnaba una defensa férrea por las aguas de las cuencas alto andinas.
Lo dicho por el presidente de la republica marcara el inicio de una gran disputa o conflicto por las aguas en todo el país: LA GUERRA POR EL AGUA CON LAS MINERAS. Ollanta con este mensaje se convierte en un político del sistema: camaleón, tránsfuga, bipolar, astuto, frió y calculador, insensible, caudillo y felipillo. Como diría el cantautor Abanto Morales, por unas cuantas monedas vendes al país, sus aguas, sus tesoros, su mundo y su vida prácticamente. Así es el político del sistema neoliberal, pues así lo fue Fujimori, Toledo, Alan y ahora Ollanta.
Mensaje tranquilizador para la CONFIEP, para las transnacionales mineras, es lo que ha dado Ollanta Humala; así lo dicen casi todos los medios de comunicación de la derecha. Dicen que no quieren que la exitosa economía se caiga, pues el saqueo de los tesoros de las serranías es el bienestar de los sedientos mineros, de los burócratas y tecnócratas del capitalismo, que solo les interesan obtener el oro a cualquier precio. A ellos no les importa destruir sus lagunas, sus pastizales, sus tierras comunales y sus nacientes de aguas. Solo viven embriagados del oro y de los otros metales.
A sangre y fuego impusieron las 100 leyes PRO-TLC para depredar y saquear los tesoros de las montañas, las riquezas biológicas de la selva y traficar con la mega biodiversidad que el Perú posee. El BAGUAZO FUE EL ICONO DE LA GESTA emancipadora de las comunidades nativas para evitar que los mercaderes de los recursos naturales acaben privatizando todo hasta el aire que respiramos. Esta lección que da la historia, Ollanta lo esta ignorando increíblemente.
Todo el sistema minero en el país debe replantearse si es que queremos una paz social justa y equitativa. Para ello, primeramente la Constitución Política debe reformarse definitivamente. Se debe respetar todos los convenios internacionales que protegen las comunidades, las reservas ecológicas y culturales. La CONSULTA POPULAR debe ser vinculante. Antes del inicio de cualquier proyecto minero se tiene que ver el ordenamiento territorial, la Zonificacion Ecológica y Económica. El reparto de los productos mineros debería fijarse en 60 – 40 (60% para las mineras y 40% para el país).
Hoy, casi todos los ríos del país están siendo seriamente dañados por la fiebre de los metales como el oro, cobre y uranio que los mineros impunemente actúan con el aval de los gobiernos de turno. El Perú es un país minero publicitan en todos los medios de comunicación masivos los mercaderes del vil metal. Pero para los que vemos al agua, los ríos, los nevados como un tesoro jamás comparado, el Perú, es una joya ecológica incomparable que no esta siendo aprovechada sosteniblemente.