MALEÑOS EXIGEN HACER PREVALECER EL PRINCIPIO DE AUTORAIDAD…
Escribe: Marcelino Antonio Agapito Manco (corresponsal en Mala)
HABRÍA MALVERSACIÓN DE FONDOS PÚBLICOS…
Un nuevo escenario sombrío se apodera de la psicología colectiva de los ciudadanos maleños, la desdibujada gestión del Alcalde distrital Víctor Hugo Carbajal Gonzales no ha podido solucionar el problema del Transporte público. Mala presenta un aspecto de desorden que ahuyenta el turismo receptivo, no hay ningún tipo de control, en pocas palabras es un desorden total del ordenamiento del transporte público en esta ciudad, donde no se respetan los paraderos, de vehículos menores, en cualquier lugar se ubican los vehículos medianos además, que las calles han sido tomados totalmente por el comercio ambulatorio, lo que ocasiona que el transeúnte o vecino no tenga por donde caminar libremente , porque sus veredas y pistas han sido tomados por los ambulantes, lo que es peor al cobrarse «el impuesto» se legaliza a estos negocios.
SE ESTARÍA MALVERSANDO LOS FONDOS PÚBLICOS…
En el diccionario jurídico encontramos que malversar los fondos públicos es: «Destinar los fondos públicos colectivos o ajenos a gastos diferentes de aquellos a los que estaban destinados; uso indebido del escenario público; o mal uso de los fondos públicos».
Hace más de una década se construyó un mercado de frutas en un lugar inapropiado al que se oponía la gran mayoría de ciudadanos, el gobierno de entonces del señor Mauricio Chumpitazi Porras, no escuchó y simplemente lo construyó con dinero del erario público, este «Mercado de Frutas» jamás fue utilizado, un verdadero «elefante blanco» hechos que no deberían volverse a repetir como muchos que existen en la provincia de Cañete, aquel dinero pudo haberse utilizado para ayudar a la gente de mayor necesidad, pero no se hizo; pasaron los años y con bombos y platillos la actual gestión de Víctor Hugo Carbajal Gonzales prometió reubicar y ordenar todo el transporte público empezando por los ómnibus (vehículos mayores) que han tomado el lugar céntrico de la ciudad generando un caos de consecuencias impredecibles, para ello se construyó en el mismo lugar y «mercado de frutas» un terminal terrestre bajo la promesa que en menos que cante un gallo estaría estas empresas de transporte reubicadas, asimismo como si la historia se repitiera se le alertó al alcalde que ese no era el lugar apropiado par construir el «terminal terrestre» (pues está a escasos 200 metros de la ciudad) si cabe el termino, tampoco se nos escuchó, se ha «invertido» más de medio millón de soles en otro «elefante blanco» que no funciona, ni será útil para solucionar el complejo tema del transporte, vamos camino al año de la «construcción» de dicha obra, resulta que no se ha realizado ninguna reubicación, los transportistas dicen no saber del traslado o se hacen los desatendidos, en la municipalidad se guarda un silencio a sabiendas que su acción contrasta con la legalidad; finalmente quiero expresar que este tipo de decisiones absurdas y abusivas de la autoridad edil no debe quedar impune, no se puede botar tanto dinero en nombre de la incapacidad edil, nos preguntamos ahora, quien será el otro alcalde que tenga que hacer por tercera vez otra «obra» en un lugar donde se gastó demasiado dinero y nunca funcionó absolutamente nada.
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