¿LA LIBERTAD DE INFORMACION ES UN ABUSO DEL DERECHO?... CREEMOS QUE NO... SEÑORA DIRECTORA DEL HOSPITAL REZOLA

Por Vladimir Alexander Rojas Hinostroza

María Díaz Vera, actual mandamás del Hospital Rezola de Cañete, parece no encontrar la «correa» adecuada que le impida irritarse cuando un medio de comunicación da lectura a un documento que compromete su gestión.
Sin una explicación clara a la adquisición de una camioneta valorizada en 70 mil soles, la falta de control sobre el personal y sus descansos, la utilización de viáticos a discreción asolapada, el derroche de bonificaciones a su personal más cercano, e inclusive con pedido de almuerzo a los escritorios, Díaz Vera se ha visto mortificada en más de una ocasión, cuando se habla de su gestión en algún medio radial.
¿Qué esconde María Díaz para sentirse indignada porque un periodista o ciudadano lee documentos oficiales sobre actos administrativos que son de conocimiento de su portafolio? Imaginamos que no debe esconder nada, aunque podríamos equivocarnos.
Ante tal circunstancia, la Directora del Rezola ha ensayado una infeliz conclusión ante un pedido de acceso a la información: «Se está estudiando la posibilidad de denuncia por abuso del derecho, ya que muchos de los documentos terminan siendo leídos en programas radiales».
Tan aberrante despropósito está dirigido al Dr. Montoya Cieza (Jefe de la DIRESA) en el Oficio N° 454-2012-DIRESA-L-HRC-DE).
¿Acaso puede constituir un abuso del derecho, el ejercicio de leer un oficio, carta, informe, pericia, o cualquier documento de naturaleza pública? PUES NO. Lamentablemente, Díaz Vera no lo cree así, quizás confundida por creer que los asuntos del Hospital Rezola son de carácter reservado, y que su institución está adscrita a las Fuerzas Armadas. Dejémosle el beneficio de la duda.
Pero ante la duda, se le debe refrescar la memoria, porque si María Díaz no conoce el límite de sus funciones, que la han llevado a proponer una amenaza a la libertad de información, nuestra Directora del Rezola debe recordar que su gestión contrato a una ciudadana que también desconocía la labor para la que fue requerida: Transparencia y Acceso a la Información Pública.
Y en el citado oficio Díaz Vera indicó: «… la encargada de transparencia desconocía totalmente la respectiva ley y su reglamento, induciendo a todo el personal a varios errores».
Así las cosas, María Díaz Vera no tiene justificación alguna para señalar que el hecho de publicitar un documento solicitado de acuerdo a Ley constituye un abuso del derecho.
Más aún, cuando recientemente se viene licitando la adquisición de un MAMÓGRAFO VALORIZADO EN UN MILLÓN CIEN MIL NUEVOS SOLES.
Gracias a la información, se da cuenta en forma reciente que una de las empresas postoras (EL TUMI PERU SRL) ha cuestionado tal licitación, toda vez que el propio Hospital Rezola terminó modificando los requerimientos técnicos del mamógrafo requerido, y que terminan favoreciendo a una sola empresa, pese a que la naturaleza de las licitaciones, es que concurran la mayor cantidad de postores, para que el Estado elija el mejor precio.
En dicho documento, se puede apreciar que el Hospital Rezola en un primer momento rechazó el pedido de la denunciada empresa «beneficiaria» consistente en que las características del mamógrafo a comprar se ajusten al producto que ellos ofrecían. En una segunda oportunidad, los responsables del Hospital Rezola cambiaron su opinión.
Más allá de la explicación que debe darse a este tema, sería aconsejable que María Díaz Vera renuncie a amenazar a la libertad de información. Salvo que crea, que el presente artículo también es un abuso del derecho.
Señora Directora del Rezola, cuide bien los recursos del Hospital, y deje a la prensa y los ciudadanos, la libertad de ser informados, y analizar (y comprobar) los actos de su entidad.